Rara como encendida, te vi bebiendo linda y fatal, bebías y en el fragor del champan nunca reías por no llorar, pena me dio encontrarte pues al mirarte yo vi brillar tus ojos en un eléctrico ardor tus bellos ojos que tanto adore, esta noche amiga mía que el alcohol nos ah embriagado
No me importa que se ría y nos llamen dos tarados cada cual tiene sus penas, y nosotros la tenemos, esta noche beberemos por que ya no volveremos ah vernos mas
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